“La enmienda legislativa que ataca el derecho de huelga no pasará. Incluso si se aprueba, los obreros la cancelarán en la práctica.” Este fue el mensaje claro que enviaron los trabajadores  que respondieron inmediatamente al llamamiento del Frente Militante de Todos los Trabajadores (PAME), de las organizaciones sindicales con orientación de clase, participando en las manifestaciones que tuvieron lugar el 5 de diciembre de 2017 en Atenas y en muchas ciudades en todo el país.

El 4 de diciembre por la noche, el gobierno de SYRIZA-ANEL trató de aprobar de manera solapada y como un ladrón la abolición del derecho de huelga. No logró llevar a cabo el plan inicial, por lo que retiró la enmienda poco antes de medianoche del mismo día, después de la reacción del KKE y de las organizaciones sindicales que denunciaron de inmediato las acciones miserables del gobierno y organizaron una manifestación a la hora prevista para la discusión y votación de la enmienda. En cualquier caso, el gobierno que hace el trabajo sucio para el capital, sigue adelante con su plan antiobrero y planea traer de nuevo la enmienda en otro proyecto de ley.

Con este proyecto de ley, el gobierno establece como condición previa para la convocatoria de huelga que la decisión tenga el apoyo del 50% + 1 de los trabajadores en la asamblea y en la votación. Y esto, como denunció Dimitris Koutsoumpas, Secretario General del CC del KKE, en el parlamento, ocurre en condiciones cuando la arbitrariedad de los empleadores, la intimidación, el chantaje de despido, llevan a los trabajadores a actuar a escondidas incluso para informarse, o para discutir de manera colectiva, o para organizar una asamblea, una movilización, o una huelga, como si estuvieran en condiciones de profunda ilegalidad.

El Secretario General del Comité Central del KKE destacó entre otras cosas: “Su gobierno es implacable, sin remordimiento, en lo que se trata de servir los intereses del capital. Sus cuadros llegan al punto de decir que de esta manera están fortaleciendo la democracia en los sindicatos. ¡Han roto todos los récords! La Federación Helénica de Empresas seguro que está llorando emocionada en este momento. No hubieran imaginado en sus sueños más locos tener un siervo tan capaz. Por esta razón reciben ustedes todas estas felicitaciones, como dije antes, de sus “socios” en la Unión Europea”.
Además, Dimitris Koutsoumpas, advirtió al gobierno antipopular: “están bien equivocados si creen que este monstruo será aplicado. Los trabajadores lo cancelarán con su organización y su lucha, igual que cancelarán todo intento de obstaculizar su lucha, el progreso social, y, en algún momento, abandonarán a todos los representantes políticos de este sistema de explotación podrido.”

Los trabajadores respondieron de manera inmediata y combativa contra los planes antiobreros del gobierno, de la Unión Europea y del capital de abolir el derecho de huelga, participando en la movilización del Frente Militante de Todos los Trabjadores (PAME) en Atenas el 5 de diciembre al medio día.

Los manifestantes del PAME, después de su protesta se dirigieron de manera organizada al ministerio de “Trabajo”, que fue cerrado y  la dirección política había desaparecido.

Los obreros respondieron a esta nueva provocación elevando las persianas y entraron en el pórtico que conduce a la entrada del ministerio contra el esfuerzo de las fuerzas antidisturbios de impedirlos. La intervención de la policía causó heridos entre los manifestantes, y uno de ellos fue el presidente del sindicato de los trabajadores de la Organización Administrativa Local de la región de Ática.

Los obreros quitaron una por una las letras del letrero del “MINISTERIO DE TRABAJO” para mostrar que el ministerio no es de los trabajadores sino de los empleadores.

A continuación la movilización se dirigió hacia el parlamento con las consignas: “La huelga es derecho de los trabajadores, conquistado con luchas, sangre y sacrificios”, “Adelante, por sindicatos de los trabajadores y no del gobierno de los empleadores”. Cuando los trabajadores llegaron frente del parlamento, escribieron en su entrada en rojo la consigna “Manos fuera de la huelga” y “entregaron” las letras que habían quitado del letrero del ministerio.

La marcha se dirigió al Palacio del Primer Ministro donde el gobierno “dio la bienvenida” a los manifestantes formando barreras en las calles con las camionetas de la policía y lanzando gases lacrimógenos a los manifestantes, confirmando su autoritarismo.

La movilización terminó con el discurso de Nikos Mavrokéfalos, miembro del Secretariado Ejecutivo del PAME, a los manifestantes: “Esta fue una primera respuesta. Que no se atrevan a traer de modo inesperado leyes contra el derecho a la huelga. La clase obrera les responderá decisivamente. Vamos a dar todas nuestras fuerzas a partir de este momento, cada día, en los centros de trabajo, en las ramas, sin perder tiempo, para hablar con los trabajadores, para preparar la organización y la escalada de nuestras luchas, para preparar una exitosa huelga para el 14 de diciembre”.

Decenas de mensajes de solidaridad de todo el mundo han llegado al PAME. La Federación Sindical Mundial también emitió un comunicado condenando los planes antiobreros.

06.12.2017