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COMUNICADO DEL BURÓ POLÍTICO DEL COMITÉ CENTRAL DEL KKE

DESBLOQUEARSE AHORA DE LOS PELIGROSOS PLANES IMPERIALISTAS

El KKE ha condenado los ataques criminales en París con muchos muertos y ha expresado su sentido pésame a las familias de las víctimas y su solidaridad con el pueblo francés.

 

Hoy, pocos días más tarde, vemos que esos ataques, en nombre de la lucha contra el terrorismo, tratan de convertirlos en la coartada para el mayor involucramiento imperialista en Siria, y, a la vez, para el fortalecimiento del control policial, de la represión, del racismo y la xenofobia en Europa.

 

Sobre esos acontecimientos, que requieren la vigilancia de los trabajadores y el desarrollo de la lucha popular, es necesario plantear lo siguiente:

 

1. La guerra que hace 5 años se está librando en Siria y ha costado la vida de centenares de miles de personas, mientras ha desarraigado de sus casas millones de personas, es parte de la agresividad imperialista y los antagonismos interimperialistas. Demuestra que el capitalismo, que aumenta la riqueza de un puñado de explotadores, produce al mismo tiempo crisis, problemas sociales, la guerra, el exilio, con consecuencias dolorosas para millones de personas del pueblo.

 

El KKE desde el primer momento, y cuando los partidos burgueses y oportunistas «celebraban» la llamada «primavera árabe» resaltaba la barbarie capitalista, sobre la base de la cual se va desarrollando la guerra en Siria, así como la operación organizada de la intervención de las fuerzas imperialistas de los Estados Unidos, de la Unión Europea y de sus aliados en la región, Israel, Turquía, Arabia Saudí, Qatar, los Emiratos en los asuntos internos de Siria.

 

2. Las aspiraciones de esta intervención están en la promoción del plan del «Gran Oriente Medio», que, como con tiempo habíamos subrayado, tiene que ver con asegurar el acceso de los monopolios norteamericanos y europeos a las fuentes de energía y los nuevos yacimientos del Mediterráneo del Este, al control de una gran área que constituye un «paso» al comercio y transporte.

 

A la vez, tiene como objetivo la «recomposición» de los regímenes burgueses para asegurar en la medida de las posibilidades la base firme para la expansión de los grupos monopolistas en los mercados de la región.

 

Esos planes están en fuerte contradicción con los intereses monopolistas que tienen en esta área otras fuerzas, como Rusia, China y sus aliados en la región.

 

3. Para los objetivos de esta intervención se ha utilizado por los imperialistas euroatlánticos el llamado «islam político», como antes se habían utilizado los «talibanes» en Afganistán, en la década de los ´80. Durante el desarrollo de la intervención imperialista en Siria, se han apoyado, organizado, armado por los imperialistas diferentes grupos parecidos.

 

La intervención imperialista en Siria, junto con aquellas que se habían anticipado en los últimos años, como la ocupación de Afganistán y de Irak, la disolución de Libia, son las que condujeron a este producto monstruoso de los asesinos, el llamado «Estado Islámico».

 

4. La intervención militar rusa en la región, a finales de septiembre de 2015, fue una señal de la mayor agudización de las contradicciones, que se van dando fuertemente para el control de las materias primas, los caminos de transporte de las mercancías, las partes de los mercados, la obtención de «apoyos» geopolíticos y militares en la región del Mediterráneo del Este y del Oriente Medio.

 

El golpe sangriento en París, que se utiliza para escalar  la intervención militar de Francia y de otros países capitalistas, puede tener consecuencias trágicas, i.e. conducir al desmantelamiento de Siria, o a una confrontación imperialista más «generalizada», o a un compromiso con una «paz» falsa con «la pistola en el pecho».

 

Los trabajadores no deben dejarse arrastrar por los pretextos del «derecho internacional», «la crisis humanitaria», «la ola de refugiados e inmigrantes», y otros que utiliza cada fuerza imperialista para promover sus planes. No deben permitir que se conviertan sus hijos en «carne para los cañones» de los antagonismos interimperialistas y derramar su sangre para intereses ajenos, o sea para los intereses de esta u otra alianza de intereses monopolistas.

 

5. Los trabajadores en Grecia y en todos los países europeos deben ver qué es lo que se oculta detrás de la «mano armada» de los asesinos, deben ver aquellos que planifican, crean, arman, financian, instruyen y finalmente utilizan esas fuerzas para aprovecharse de ellos y promover sus planes.

 

No debe pasar el clima de miedo, de tolerancia hacia las intervenciones imperialistas, la guerra imperialista, las medidas de represión contra los pueblos, la nueva ola de xenofobia y racismo que se va desarrollando y cultivando los distintos Estados Mayores burgueses.

 

Los trabajadores deben rechazar las posiciones planteadas por partidos burgueses y los medios de comunicación, incluso los fascistas del Amanecer Dorado, que supuestamente «Europa afronta un ataque» que se va dando una «guerra de civilizaciones o religiones» y que hace falta que todos «con espíritu de unidad nacional (o europea) para contrarrestar el ataque».

 

Esa retórica falsa, «pro-occidental», «pro-europea» y «patriótica» tiene sólo un objetivo: dar a los trabajadores a tomar el «veneno» del racismo y la xenofobia, para que los arrastren a continuación a la masacre en nombre de los intereses de los grupos monopolistas, de los Estados Unidos, la UE, la OTAN y sus aliados, que se van confrontando en la región del Mediterráneo del Este con los monopolios rusos y chinos y sus aliados.

 

6. El gobierno SYRIZA-ANEL tiene inmensas responsabilidades, porque tanto en los asuntos de política exterior como en éstos de la política interior agarró el                   «relevol» de los gobiernos de la ND y del PASOK, aplicando una política antipopular peligrosa.

 

Detrás de la llamada política exterior multidimensional y la aspiración a una revalorización geoestratégica, el gobierno sirve en los intereses de los grupos monopolistas griegos. Proclama su fidelidad a las uniones euroatlánticas, que han llevado a calamidades nuestro pueblo, a la pérdida de derechos soberanos. Así que ahora entrega terreno, puertos, aeropuertos y otra infraestructura del país a las uniones imperialistas de la OTAN y la UE para que continuen las intervenciones imperialistas y las guerras, fortalece incluso la cooperación militar con Israel contra los pueblos de la región.

 

El gobierno está  expuesto después de la decisión unánime del Consejo de los ministros de Defensa de la UE, que, con el pretexto del ataque asesino en París, activó el artículo 42, párrafo 7 de la Convención de la UE (Tratado de Maastricht) que reconoce el papel fundamental de la OTAN, o sea el papel hegemónico de los Estados Unidos, y prevé ayuda militar a la operación de escalación y generalización de la intervención imperialista en el Oriente Medio y África del Norte.

 

Nuestro pueblo debe ponerse en alerta incluso para lo que pasa en las relaciones greco-turcas, las «cosas que se dan a cambio» y que pide Turquía por parte de la UE para arreglar el problema de refugiados e inmigrantes, que tienen relación con la evolución de las negociaciones sobre el asunto chipriota, pero también con su aspiración permanente a formas de «co-dominio» en el Mar Egeo, a expandir las «zonas grises», etc.

 

A la vez, nuestro pueblo debe estar listo para las consecuencias de la política de las «fronteras cerradas», que aplican países de la región, ya que con eso se hace más real  que nunca el peligro de encerrar a centenares de miles de refugiados e inmigrantes en Grecia.

 

7. Ahora debe fortalecerse la lucha popular contra la participación de nuestro país en la intervención imperialista y la guerra.

 

Las Fuerzas Armadas del país no deben ponerse a la disposición de los planes imperialistas.

 

Que se cierren ahora todas las bases norteamericanas de la OTAN.

 

Que no se ofrezca ninguna facilidad, ninguna infraestructura del país para que se utilice como base de partida para los ataques contra Siria u otros países.

 

Que nuestro pueblo esté en alerta, que no tolere ninguna medida autoritaria en su contra en nombre de la «lucha contra el terrorismo».

 

Que no se utilice el ataque para tomar medidas contra los refugiados y para encerrarlos en nuestro país.

 

Que el pueblo aisle la organización nazi y criminal de los asesinos del Amanecer Dorado, que apoya intervenciones militares imperialistas y siembra el odio contra los pueblos.

 

Que se ponga en la práctica la consigna popular «Ni tierra ni agua a los asesinos de los pueblos».

 

Que se fortalezca la lucha popular contra los monopolios y el capitalismo, por que se desligue nuestro país de las uniones imperialistas de la UE y la OTAN, por el poder obrero-popular.

 

 

EL BURÓ POLÍTICO DEL COMITÉ CENTRAL DEL KKE

 

20 DE NOVIEMBRE DE 2015